Las lesiones anorectales es muy común en pacientes que presentan el virus de la inmunodeficiencia Humana, años atrás se estimaba que de 5 a 35% de los pacientes con VIH desarrollaban estas manifestaciones proctológicas, pero en estos últimos años las lesiones anorectales se presenta en la tercera parte de los individuos seropositivos. Los pacientes con VIH pueden llegar a desarrollar lesiones o patologías anorectales que son común a la población general, como fisura anal, fistula anal, absceso, hemorroides, pero también puede presentar otras manifestaciones debido a la práctica de relaciones sexuales anales que predisponen a enfermedades de trasmisión por vía anal como los condilomas acuminados, el síndrome diarreico y las ulceras anales. Siendo las lesiones anorectales más frecuentes en estos pacientes el condiloma acuminado (ocasionado por infección de papilomavirus humano).

Adicionalmente, los pacientes con VIH positivo presentan un riesgo incrementado para el desarrollo de cáncer anal, linfoma y sarcoma. Las lesiones anorectales se describe como el daño o patología que afecta la cavidad o en los tejidos de la región anorectal, constituyéndose como un problema de salud pública debida a las complicaciones que produce este tipo de anomalías en los pacientes VIH positivo, los cuales existe mayor prevalencia en el sexo masculino, su incidencia máxima se localiza entre los 30 a 59 años de edad, la principal manifestación clínica es el dolor perinatal, el mismo que origina 15% de las intervenciones quirúrgicas colorectal. 

En América Latina el compromiso anorectal es muy común en los pacientes con VIH. Se estima que entre 5 y 35% de los pacientes desarrollan manifestaciones proctológicas. La enfermedad anorectal se presenta en la tercera parte de individuos seropositivos, el estado de la inmunosupresión en una elevada frecuencia de sepsis perianal y de padecer mayores complicaciones como gangrena necrosante y obsesos metastásicos en pacientes infectados de VIH, algunos desarrollan mayor absceso interesfintéricos, abscesos crónicos y abscesos complejos. La mejor forma de prevención de las lesiones perianles en VIH, es el control médico frecuente, el cumplimiento del tratamiento y uso de preservativo en caso de hombres y mujeres  ano receptivos.